Sábado 4 de agosto de 2001, ESPECTACULOS, LA NACION
ROCK EN LA PROVINCIA
Hoy, Los Redondos en Córdoba
Presentarán su disco "Momo Sampler" y se espera que asistan unos 40 mil fans
El show comenzará a las 19 Se desplegará un fuerte operativo de seguridad que incluye 2150 policías Hay gente que está acampando desde hace semanas
CORDOBA.- La ciudad está lista para recibir a la banda más convocante de la Argentina. Luego de dos meses de preparación, se podría decir que "todo está dispuesto" para que Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota se presenten hoy en el Estadio Córdoba, donde se esperan unas 40 mil personas. Al menos así lo confirmó a LA NACION uno de los productores del show, Arturo Iturraspe, al asegurar que "los chicos (el Indio Solari, Skay Beilinson y Carmen "Poli" Castro) están muy contentos; todo quedó espectacular".
La prueba de sonido en el estadio se realizó anteayer por la tarde, ante la hinchada de las primeras bandas que llegaron a esta ciudad y que acampan muy cerca de la cancha. Los Redondos vinieron desde las sierras, donde pasaron los días previos al recital, para probar los instrumentos y cantar algunas canciones en el escenario que demandó una semana de construcción. Según Iturraspe, todo lo referido a la organización "anduvo bárbaro" y no se presentaron inconvenientes de ningún tipo.
El anuncio de que la banda haría en Córdoba la presentación nacional de su décimo disco, "Momo Sampler", causó conmoción entre los seguidores del grupo, que durante 14 años no pudieron escucharlos cantar en esta ciudad, y también entre todos aquellos que sólo reconocen a los Redondos a partir de los episodios de violencia registrados en los recitales de Buenos Aires, Villa María o Mar del Plata, y que en su momento ganaron las pantallas de televisión.
Para tranquilidad de los que temen nuevos disturbios de la avalancha ricotera y para seguridad de todos aquellos que viajan cientos de kilómetros para ver un buen show, la policía de la provincia y las direcciones de Tránsito y Protección Ciudadana de la municipalidad diseñaron un enorme operativo, destinado a que nada empañe el espectáculo.
Despliegue policial
Además de los 2150 policías que controlarán los movimientos fuera del estadio y los 300 guardias privados contratados por la producción para garantizar la seguridad dentro de la cancha, habrá 120 integrantes de Protección Ciudadana, cuya misión es brindar asistencia y prevenir accidentes, más 40 paramédicos que trabajarán con dos carpas sanitarias, ubicadas estratégicamente dentro del predio, y tres ambulancias con equipamiento de alta complejidad.
La tarea de los policías no se limitará a controlar el ingreso del público, sino que además vigilarán la entrada de autos y colectivos en todos los accesos de la ciudad. Hasta ayer se habían vendido unas 30 mil entradas (hay ocho puestos de venta en distintas ciudades) y, según los productores, la mitad del público será gente llegada desde diversos lugares del país.
El tránsito en el sector estará cortado a partir de las 10 de la mañana y los vallados se ubicarán a cinco cuadras del estadio, de manera que todo el público accederá caminando. Los que lleguen en auto podrán estacionar en un espacio previsto especialmente, también a cinco cuadras, ya que no habilitarán los estacionamientos propios del estadio para "descongestionar" la zona. Y los colectivos provenientes de otras ciudades esperarán en un predio ubicado a 300 metros de la cancha. La municipalidad también habilitó servicios especiales de transporte, a partir de las 12, para llevar y traer espectadores.
Una vez que el público llegue a la zona "peatonal" (donde está prohibido vender alcohol), pasará los cacheos de armas de la policía e ingresará en la cancha por el acceso sur, que será el único habilitado para todas las ubicaciones. Para evitar desbordes en la entrada se construyeron diez "grillas" o pasillos. En la puerta también habrá seis arcos detectores de metales. Una de las ventajas que ofrece la cancha del barrio Chateau Carreras es que está alejada del centro y eso evitará molestias para el resto de la ciudad.
La puerta del estadio se abrirá a las 14.30, ya que la idea es que el público ingrese de manera lenta y constante durante toda la tarde, y el recital comenzará a las 19, con puntualidad. En el interior del predio habrá puentes para que los espectadores se desplacen del campo a las plateas, por ejemplo, con total libertad.
Igual que en River
Los Redondos se demoraron en volver a Córdoba (se presentaron en 1987 ante 300 personas), pero valió la pena esperar. Las características técnicas del show serán idénticas al que ofrecieron el año último en River, lo que hacer prever que será uno de los espectáculos más grandes montados en la ciudad.
El escenario, de 40 metros de frente por 20 de ancho, tendrá de fondo una gran pantalla gigante, que funcionará como escenografía principal. A su vez, otras dos pantallas de alta definición ubicadas a los costados reproducirán el show para los que estén más lejos. El sonido estará colgado en dos torres de seis toneladas cada una, ubicadas en los laterales.
Sin embargo, a algunos fans incondicionales les importa poco el despliegue técnico. "Está bueno que suenen bien, pero nosotros los iríamos a ver aunque tocaran en un sótano de terror. Lo único que queremos es estar ahí y compartir con ellos esta historia", dijeron unos chicos del barrio Nueva Córdoba, mientras le daban los toques finales a una bandera de 20 metros que desplegaron sobre la calle Independencia.
Es que el furor se respira desde hace varios días en esta ciudad. Aun antes de que Solari concediera un par de reportajes a los medios locales (que se dieron el gusto de entrevistarlo por primera vez), el clima de "militancia" ricotera ya estaba instalado en la ciudad. Decenas de móviles de televisión, por ejemplo, desfilaron por el camping municipal San Martín, el lugar elegido para albergar a los visitantes de todo el país. También pasó por allí la policía, que el martes último detuvo a tres jóvenes y secuestró varias dosis de marihuana.
En el San Martín hay de todo, y más heterogénea aún será la multitud que hoy vibrará en el estadio. Sin embargo, es ahí, en el camping municipal, donde se fue cocinando el fervor que estallará esta tarde, cuando los Redondos irrumpan en el escenario.
Aprovechando la presencia de tantos jóvenes, que esperan tomando mate y jugando al fútbol, dos organizaciones no gubernamentales que trabajan en la prevención del sida (Asociación Argentina para la Reducción de Daños y Perspectiva Social) repartirán en el San Martín unos 15 mil preservativos. El asunto es que todo gira en torno de este megarrecital que, además de convocar un aluvión de fanáticos, congregó la atención y la curiosidad de toda la ciudad. Los preparativos terminaron, y ahora vendrá lo fundamental: la música que Solari y su banda saben tocar.